Focaccia de verano
Como alguna vez escribí en este blog para mi la focaccia, es la brioche italiana.
Rica, sabrosa, aireada y súper versátil para agregarle cualquier sabor extra: en este caso tenía cebollas y pimientos que rehogué con un poco de aceite, sal, pimienta y mucho tomillo fresco. Pero bien puede tener aceitunas negras o verdes, alcaparras, anchoas, romero, orégano, ají molido, uvas negras, ciruelas si te gusta lo agridulce, ajo, echalotte, verdeo, puerro, tomates secos, cherries...en fin, las opciones son parte de los sabores que te gustan y lo que tengas a mano, o simplemente sin nada, solo oliva y algo de sal gruesa.
Para una asadera de 45 x 35 cm usé lo siguiente:
Ingredientes
1 Kg. de harina 0000 ó 000
50 grs. de levadura
1 cucharada de azúcar
600 cc de agua tibia
20 grs. de sal fina
50 cc de aceite de oliva (ó el que tengas)
Tomillo fresco
2 cebollas rojas
1 cebolla blanca
1 pimiento morrón rojo
Aceite extra para saltear los vegetales
Procedimiento
Mi técnica para hacer focaccia, es muy fácil, no hay que amasar, solo mezclar y dejar descansar para que el tiempo haga lo suyo con la levadura.
En un bowl grande, colocás el agua, la levadura, el aceite de oliva y el azúcar. Mezclás muy bien hasta disolver. Ahí mismo, agregas de un golpe toda la harina y mezclás hasta formar un engrudo, sí, un engrudo, debe resultar muy hidratada la mezcla.
Ahora la sal y volvés a mezclar. Tapás con repasador y dejás leudar al menos 20 minutos, todo dependera de la temperatura ambiente.
Transcurrido ese tiempo donde la masa creció y duplicó o triplicó su volumen, le sumás los sabores o ingredientes extras, en este caso el tomillo fresco y la cebolla y pimiento rehogados. Mezclás para integrar y otra vez a leudar.
Prendé el horno a 180/190º C.
Aceitá una asadera o placa en la base y las paredes también, si te da la economía con oliva, sino, todo con aceite neutro.
Volcá la masa con la ayuda de una espátula o con las manos humedecidas o apenas aceitadas y andá llevandola hacia los bordes de manera uniforme. Dejamos leudar nuevamente hasta que crezca y se llene de aire.
Antes de entrar al horno, hilos de aceite de oliva y yo le agrego algo que me me gusta como le queda: un poco de salmuera esparcida por la superficie, que no es más que una cucharada de sal gruesa disuelta en agua tibia.
Horneá entre 20/35 minutos hasta que la superficie esté dorada y crujiente!